Es un sistema no invasivo que aúna una técnica de enfriamiento y un sistema de Vacumterapia. Se puede aplicar en un amplio abanico de zonas, como glúteos, brazos, abdomen, piernas y espalda.
Primero se aplica una crema o una membrana anticongelante para proteger la piel de la exposición al frío y asegurarse de que este llega a los adipocitos grasos. El cabezal masajea la zona a una temperatura de entre 5 y -12ºC, dependiendo de las características propias del paciente.
Después se procede con el sistema Vacumterapia o efecto vacío o succión sobre la zona localizada, para separar los adipocitos grasos del riego sanguíneo. Una vez que las células grasas están cristalizadas, tan solo son necesarias algunas semanas para expulsar definitivamente esas células de nuestro organismo de forma natural.
Las sesiones duran entre media hora y dos horas y sus resultados son apreciables a partir del tercer mes de tratamiento, hay que dejar tiempo al cuerpo a expulsar las toxicidades y células grasa. Los resultados se pueden apreciar en la reducción de bastantes milímetros en la zona tratada.
Por supuesto una alimentación equilibrada y ejercicio físico diario moderado son complementos ideales y necesarios para mejorar los resultados del tratamiento.